Policías municipales de distintos lugares de la isla hacen un curso de drogas de abusos

Policías locales de tráfico de distintos municipios de Gran Canaria contarán con aparatos de alta precisión para detectar cualquier tipo de droga

Medio centenar de agentes de la Policía Local de Tráfico ha realizado un curso especializado en la detección de drogas y alcohol en los conductores. Las clases han incluido ejercicios teóricos y prácticos para el control rápido de ‘drogas de abuso’ a través de la saliva y de la pupila, además de alcohol mediante el aire espirado.
“La formación y el perfeccionamiento de las técnicas de control de nuestra Policía Local es la mejor garantía para la seguridad de la ciudadanía”, explica el concejal de Seguridad, Jesús González Dumpiérrez, ya que “de su destreza a la hora de detectar conductores que se encuentran fuera de los límites legales para ponerse al volante depende en buena medida la prevención de accidentes”.
Más de cuarenta agentes de la Policía Local de la capital grancanaria y varios miembros de las policías de Arucas y Telde se han sometido a este curso, que ha incluido un ejercicio práctico en un control de carretera.
Los instrumentos utilizados en este curso son de última generación, siendo capaces de determinar la presencia de sustancias prohibidas en cuestión de minutos. Además del alcohol, las denominadas ‘drogas de abuso’ que incluyen estos aparatos son la anfetamina, la metanfetamina (éxtasis), la cocaína, los opiáceos, la metadona, la marihuana, la fenciclidina y la benzodiazepina.
Los agentes perfeccionaron el manejo del Pupilómetro Médico (capaz de detectar a través de la pupila alcohol, drogas y medicamentos), el Alcoholímetro EnviteC (mide tanto el alcohol en aire espirado como en aliento y en una bebida) y el Test Inmunológico Rádipo para Drogas de Abuso en Saliva (reconoce seis tipos distintos de sustancias).
Estos instrumentos de última generación son los utilizados por las principales policías de Tráfico de la Unión Europea. La Concejalía de Seguridad recuerda que la entrada en vigor de la nueva Ley de Seguridad Vial implica que algunas infracciones que hasta ahora eran administrativas pasan a tener penas de cárcel.